La actividad náutica no cesa en el Real Club Marítimo de Melilla. De hecho, se acabó el año en el campo de regata entrenando y realizando actividades para la flota local de vela ligera y crucero, y en los primeros días del recién estrenado 2021 es habitual ver en la bahía melillense las vela de los regatistas melillenses.

Un nuevo año que arranca, manteniendo la alerta sobre la situación actual que vivimos con la pandemía del coronavirus, pero tratando de que la nueva normalidad permita que la vela local siga navegando, gracias al empeño que ha puesto el Real Club Marítimo de Melilla en mantener vigente uno de sus principios fundacionales hace ya décadas: “promocionar la vela en la ciudad de Melilla”.

Este fin de semana han vuelto al agua las clases de vela ligera, para continuar con sus entrenamientos y actividades, que se han visto implementados tras el aumento de regatistas que ha experimentado nuestra sección náutica tras los cursos de verano.

Se sigue trabajando en la planificación de la nueva temporada, en la que nuevamente se abordarán las sesiones de perfeccionamiento con el Equipo de Regata, que en cuanto se den las circunstancias continuarán representando al Real Club Marítimo de Melilla y a la ciudad en competiciones de carácter nacional e internacional, como viene siendo una tónica en los últimos años.

Mientras tanto, este sábado y domingo los regatistas locales han tenido la oportunidad de volver a salir al campo de regatas, aunque en el caso del sábado las condiciones eran algo más complicadas, que las de esta jornada dominical con el sol nuevamente luciendo la ciudad.

De igual forma, se está aprovechando la presencia en el grupo de iniciación de hermanos para que naveguen juntos y así vayan avanzando en el dominio de la navegación de embarcaciones individuales. Un bautismo de mar, con el que comenzar a navegar.